sábado, octubre 11, 2008

El PP se venga de los artistas por el "No a la Guerra"

El cine español no está en crisis” (sic). Todo es un contubernio de los medios conservatas que se quieren vengar por la oposición de los “artistas” a la intervención en Irak. Que las pelis nacionales son la rehostia, vaya, y por lo visto auténticos taquillazos. Y quien lo niega es que es un puto rencoroso del PP.

No es por dármelas de centrista (que igual lo soy pero no lo pretendo) pero me gusta tener siempre a mano a ciertos clásicos de la izquierda. No todos los progres son iguales y Antonio Gramsci es uno de esos visionarios que aún hoy tienen vigencia. Para él, antes que la revolución política era necesaria una cultural. Patrimonializar la intelectualidad. Y, en parte, lo consiguió.

Así es que hasta cuando el ayuntamiento de Valladolid, pepero y con fama de ultra, nombra a un nuevo director de la Semana Internacional de Cine, se ve obligado a recurrir a los socialistas más rancios. Javier “rima-fácil” Angulo en su primera comparecencia a los medios empezó a lo grande; arremetiendo contra los que le pagan el sueldo y demostrando que o es ciego o es gilipollas.

“El cine español no está en crisis (sic). Todo es un contubernio de los medios conservatas que se quieren vengar por la oposición de los “artistas” a la intervención en Irak. Que las pelis nacionales son la rehostia, vaya, y por lo visto auténticos taquillazos. Y quien lo niega es que es un puto rencoroso del PP. El tío lo dice así, sin pestañear.

No se le ocurrió pensar que tal vez sea cierto y los consumidores estemos hasta la polla de películas sobre la Guerra Civil. Que precisamente son los medios, progres y fachas, los que nos venden un star system que no nos importa un carajo. Que las quinceañeras tienen posters de George Clooney y no de Antonio Resines. No. En caso de duda; la culpa de todo la tienen los neocones.

Y la causa de todos los males sigue siendo la guerra de Irak y Aznar. Pasarán 100 años y seguiremos escuchando declaraciones parecidas. Y es que hay progres y progres. Y por muy director de la SEMINCI que sea Javier "rima-fácil" Angulo ya le gustaría estar a la altura de cualquier discípulo de Glamsci de medio pelo.

4 comentarios:

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

No te veo yo a ti centrista. La culpa la tienen de todo los neocones, pero lo jodido es ver cómo meten a Thatcher y a Reagan en el mismo saco que a Bush. ¡Manda neocones!

Off-topic: a ver qué te parece la campaña de mi blog.

Un saludo

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

Si eso pon el logo con el link XDDD. Ya puedes votar.

Anónimo dijo...

Hasta la polla, pero los Girasoles Ciegos va por encima de los dos millones de recaudación, que para el cine español está muy bien.

El tema es igual, lo que importa son las películas: son ¿buenas¿ ¿malas? ¿Va el público?. Si aceptamos la taquilla como indicador, pues que sea. Particularmente no conozco otro mejor. Así que por mucha guerra civil que joda, El Laberinto del Fauno es un gran éxito y Los Girasoles es un éxito.

Pero se desconoce mucho la dimensión de este problema y se está deformando a la gente:

- subvenciones tienen la agricultura, la energía solar y muchas otras industrias. En dimensiones varias decenas de veces mayores que el cine.

- ninguna cinematografía del mundo, a excepción de USA y creo que la hindú, vive sin ayuda pública. Vayamos donde vayamos (Italia creo que las retiró hace unos años, pero se ha pasado montones con ellas). En USA, como en Europa, hay montones de incentivos de las AAPP para que se ruede en un territorio.

- Fue Aznar el que cerró el diseño del sistema actual vinculando parte de las subvenciones a taquilla. Y lo hizo pactando con célebres productores votantes del PP: resulta que los hay, pero son tan proteccionistas como los del PSOE. Y puedo jurar que su perfil personal no es el de "artista" sino el de tratantes de ganado: una actividad legítima y rentable (es decir, no es un desprecio, es una medida de la sensibilidad al dinero y a las flores hermosas).

- No son sólo las subvenciones el sistema: es la inversión obligatoria de las televisiones, con una condición: sólo pagan si emiten cine americano posterior a unas fecha determinadas que avanzan, como es lógico, con el tiempo.

- ¿A que pocos de ustedes saben que la UE subvenciona la distribución de películas europeas en el territorio europeo? Y no saben la pasta que es. Gracias a eso se estrenan en España muchas películas de alta calidad que nos hacen pensar que el cine español es peor de lo que es. Lo que pasa es que solo vemos lo bueno de fuera. Por cierto, creo que esa subvención contribuye a la subida de los precios de los derechos.

- ¿nadie escribe de las subvenciones a la música, el teatro, la danza o la difusión del libro? Las da el mismo ministerio

-Lo malo de la combinación española es que fomenta la endogamia, no crea incentivo para atraer público, no fomenta el diseño de productos internacionales, permite hacer más películas de las que el mercado puede soportar y genera corrupción (¿sabían que los productores compran taquilla si no les llega la recaudación para cobrar la subvención? como esto es imputar un delito, diré que no lo digo yo, sino que lo dijo el mismísimo Diego Galán en El País, pero pregunten a los enterados del sector, a ver qué cuentan en voz baja).

Con esto, no vean una defensa del sistema, sino una exposición de lo que ocurre. Podemos estar en contra de la intervención de lo público, pero si ocurre, debemos pedir que lo haga mejor.

Anónimo dijo...

La culpa es del PP por seguir la inercia de organizar festivales internacionales de cine en los ayuntamientos (menuda paletada además), con cargo al contribuyente.

¿Pedir que lo haga mejor? ¿Cómo? ¿Obligando en plena crisis a pagar a la gente las pajas mentales de estos elementos? Me niego, me niego rotundamente. Al diablo esta supuesta industria de parásitos, cuya sensibilidad “artística” me imagino que será directamente proporcional a la cuantía de la subvención.

Anda y que les den... pero no con mi dinero.

Y lo peor es que estos del PSOE andan animando a jovencitos a no tener otra formación que la relativa a esta ruina artificialmente mantenida de cabo a rabo. ¿Se puede ser más cortijero?

Mónica