lunes, octubre 20, 2008

El espíritu de Trotsky vaga entre nosotros

No hay más que echarle un vistazo a una perla de la cultura commie; el "Programa de transición" de Leon Trotsky. Letra por letra. Como si el texto trostskista hubiera inspirado todos los planes de rescate. Sólo falta que los que expropien sean los obreros y no el cabrón explotador para cumplirlo del todo.

Tras haberse convertido en un gurú paulsoniano, el primer ministro británico Gordon Brown ha convocado a los presidentes para “refundar el capitalismo”. Dicho de otra forma, un seminario de fin de semana-merendola sobre “cómo nacionalizar bancos y robarle protagonismo a la oposición”.

Zapatero puede ir tomando notas, sobretodo en la segunda parte. Que después de una primavera-verano sin oposición el otoño se le vuelve cuesta arriba. Además la estrategia de nacionalizar bancos es perfecta para reconciliarse con el revolucionario obrero que lleva dentro. Si hace 20 años los partidos socialistas tenían que dejar el ideario marxista, hoy en día pueden volverlo a rescatar; está de moda.

No hay más que echarle un vistazo a una perla de la cultura commie; el "Programa de transición" de Leon Trotsky. Se trata del manual de instrucciones para emprender una lucha obrera sin morir en el intento. Todo lo que usted quiso saber sobre piquetes, sindicatos y burguesía pero jamás se atrevió a preguntar. Paso número uno: La expropiación de los bancos y la estatalización del sistema de créditos.

¿Qué te llevas al wáter para leer, Gordon Brown? “El imperialismo significa la dominación del capital financiero. (…) Imposible dar ningún paso serio hacia adelante en la lucha contra la arbitrariedad monopolista y la anarquía capitalista si se dejan las palancas de comando de los bancos en manos de los bandidos capitalistas. (…) Sólo la expropiación de los bancos privados y la concentración de todo el sistema de crédito en manos del Estado pondrá en las manos de éste los medios necesarios, reales, es decir materiales, y no solamente ficticios y burocráticos, para la planificación económica”


Letra por letra. Es como si el espíritu de Trotsky hubiera poseído el cuerpo del primer ministro. Sólo falta que los que expropien sean los obreros y no el cabrón explotador para cumplirlo del todo. Por eso ni Sarko ni Merkel ni tantos otros podrán ser buenos comunistas como Dios manda. En Inglaterra tienen más suerte; Gordon Brown es laborista.

1 comentario:

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

¿Por qué todos quieren reformar el capitalismo? Lo que hay que hacer es aplicarlo de verdad, esto es, sin intervenciones.

Un saludo