Me dí cuenta de lo tremendamente sexy que es la candidata a primera dama después de haber leído el artículo que la dedicó la Vanity Fair (¡esa revista es un hallazgo!) en el que contaba su vida tormentosa.
Tengo una manía. Lo primero que hago nada más miro una foto es buscar las zonas oscuras y las claras. Y si lo que debería ser negro es un gris “quiero-y-no-puedo” necesito abrir la imagen en el photoshop y retocar la foto hasta que tenga el suficiente contraste. Me pasa lo mismo con las personas. Y Cindy McCain es una mujer con personalidad fuerte, con blancos y negros bien diferenciados.
Edd “el bellota” no se lo creía. “De todas las niñas (así es como él llama a toda mujer menor de cincuenta años) que han desfilado por la tele este año, vas y te quedas con la Cindy”. Le entró una risa tan fuerte que necesitó quitarse el pitillo de la boca durante unos segundos para coger aire.
Yo no lo veo tan raro. Me gusta Cindy McCain. Es una atracción parecida a la que sentía un efebo de Sócrates al reconocer en su maestro un sátiro por su espectacular verborrea. Me dí cuenta de lo tremendamente sexy que es la candidata a primera dama después de haber leído el artículo que la dedicó la Vanity Fair (¡esa revista es un hallazgo!) en el que contaba su vida tormentosa. Su adicción a los tranquilizantes y su coraje para superarla. Sus firmes convicciones republicanas y su (lamentable) espíritu solidario.
Son famosas sus discusiones maritales. La vez que su esposo, ante público y cámaras, la espetó: “¡al menos yo no me maquillo como una puta, gilipollas!” No sé lo que le contestaría pero no me gustaría haber sido John McCain esa misma noche. Cindy es de esas mujeres que no necesita ser feminista.
Le basta un estilo sobrio (muy del gusto de las mujeres del GOP), con líneas concisas y faldas de poco vuelo. Es contundente, como su propio carácter. Una fotografía contrastada con blancos y negros, personalidad propia y un par de pelotas. Supongo que esa es mi idea de mujer atractiva.
Tengo una manía. Lo primero que hago nada más miro una foto es buscar las zonas oscuras y las claras. Y si lo que debería ser negro es un gris “quiero-y-no-puedo” necesito abrir la imagen en el photoshop y retocar la foto hasta que tenga el suficiente contraste. Me pasa lo mismo con las personas. Y Cindy McCain es una mujer con personalidad fuerte, con blancos y negros bien diferenciados.
Edd “el bellota” no se lo creía. “De todas las niñas (así es como él llama a toda mujer menor de cincuenta años) que han desfilado por la tele este año, vas y te quedas con la Cindy”. Le entró una risa tan fuerte que necesitó quitarse el pitillo de la boca durante unos segundos para coger aire.
Yo no lo veo tan raro. Me gusta Cindy McCain. Es una atracción parecida a la que sentía un efebo de Sócrates al reconocer en su maestro un sátiro por su espectacular verborrea. Me dí cuenta de lo tremendamente sexy que es la candidata a primera dama después de haber leído el artículo que la dedicó la Vanity Fair (¡esa revista es un hallazgo!) en el que contaba su vida tormentosa. Su adicción a los tranquilizantes y su coraje para superarla. Sus firmes convicciones republicanas y su (lamentable) espíritu solidario.
Son famosas sus discusiones maritales. La vez que su esposo, ante público y cámaras, la espetó: “¡al menos yo no me maquillo como una puta, gilipollas!” No sé lo que le contestaría pero no me gustaría haber sido John McCain esa misma noche. Cindy es de esas mujeres que no necesita ser feminista.
Le basta un estilo sobrio (muy del gusto de las mujeres del GOP), con líneas concisas y faldas de poco vuelo. Es contundente, como su propio carácter. Una fotografía contrastada con blancos y negros, personalidad propia y un par de pelotas. Supongo que esa es mi idea de mujer atractiva.
8 comentarios:
Joder Fonseca, estás muy colgao. ¿No te parecen más sexys las mujeres con dos dígitos de edad? Jaja. Es coña.
Un saludo
Jo, Fonseca, ¡qué mal que estás! ;-)
Hola Fonseca, a mi me parece más bien que Cindy McCain fue en su momento una mujer atractiva, pero hoy en día...
Pero hay algo de tu post que me llama la atención, ¿por qué adjetivas como lamentable su espíritu solidario? ¿qué tienes en contra de ayudar a otros seres humanos que lo puedan necesitar? ¿esta falta de solidaridad y capacidad de comprensión hacia los problemas de los demás entra dentro del ideario liberal o incluso del libegal cañí de Fede?
Hasta la próxima.
Pues yo entiendo perfectamente a Fonseca. A mí me pasa igual con Esperanza Aguirre.
Dodgson
"Pues yo entiendo perfectamente a Fonseca. A mí me pasa igual con Esperanza Aguirre."
Fdo.: Antonio, Córdoba, el rígido.
Luismi, mientras que Cindy McCain sea solidaria con su dinero nada que objetar. El caso es que como todos los políticos y similares su solidaridad es gratis, es decir, a costa del dinero ajeno.
Tú eres un maricón reprimido, y punto.
Cindy es total. En los últimos tiempos ha optado por un look un poco antiguo, y como todas abusa de las perlas, pero antes era muy moderna. Y su biografía es interesantísima. ¿Te fijaste en la deferencia con que McCain la trata? Ayer dijo que era ella quien le inspiraba a él, y después, cuando bajaron a saludar, ella le decía dónde colocarse. Después, cuando subieron con la Palin, Cindy se apartó y su marido le indicó que se quedase en el centro. Me gusta mucho ese Médicos sin fronteras americanos que montó y la ONG que retira minas. Por lo que parece, son organizaciones efectivas.
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